Braulio, el persianista 

“Buff, aquí tienes un problema gordo”. Me preparé a conciencia para no perder los estribos. Cada vez que la dueña de la casa envía un manitas a arreglar algo, tengo tendencia a desquiciarme, así que en esta ocasión traté de leer varios tratados sobre el zen y hacer un curso acelerado de yoga. Con todo, Braulio, el persianista, me lo ponía difícil: “Esto va costar, el anterior hizo una chapuza, y ahora tiene difícil arreglo”.

¿Cómo será que cada vez que viene alguien a casa a intentar arreglar algo, el asunto parece peor que una operación corazón abierto? En este caso, yo estaba súper tranquilo, parecía la cosa más sencilla del mundo: se habían roto las cuerdas de las dos persianas de aluminio laterales del mirador. Primero fue una (lo dejé correr) y después la otra. Con las dos persianas bajadas, aquello ya no parecía un mirador, así que contacté con la dueña, pese a que sabía que cada vez que me pongo en contacto con ella entro en terreno pantanoso… Pero, ¡solo se vive una vez! ¡Qué caray!

Braulio llegó sin escalera ni nada. Un persianista como la copa de un pino… pero sin escalera. Nada más entrar en casa, alzó el cuello y dijo: “voy a necesitar una escalera”. Qué raro para un persianista. Tuve que bajar al trastero a por la mía. Y en cuanto llegué, ya empezó la retahíla de problemas irresolubles. El registro de la persiana está por fuera de la ventana, de forma que solo se puede acceder a él quitando la ventana… o colgándose desde el techo del edificio.

Braulio me venía a decir que para poder arreglar mis persianas de aluminio debía contratar a Spiderman y pagarle sus emolumentos, que no debe ser barato contratar a un superhéroe mutante. Además, supongo que tiene la agenda un poco difícil y más para venir a poner unas cuerdas en una persiana.  

Braulio se fue de mi casa con una sonrisa: “yo no me cuelgo por 30 euros”. Supongo que Spiderman tampoco, aunque él no necesite arneses. Y ahora a esperar a ver lo que se le ocurre a la dueña. Mientras tanto, yo sigo con las persianas bajadas.